A las dos semanas de llegar a Alemania, en octubre de 2010, me apunté a un tour de alta montaña.

Aquí en el pueblo hay un club de escaladores y organizan excursiones todos los fines de semana.

Yo, recién llegada, apenas hablaba alemán pero con tal ir al monte, ¡aprendo chino mandarín si es necesario!

Para esa primera excursión (a un pico en Austria que se llama Zimba) quedamos a las 5:00 de la mañana en casa del presidente del club. Desde allí salíamos a Austria.

Esa noche apenas pegué ojo.

Y a las 4:00 de la madrugada me fui sola con mi bici y con un mapa en DIN A4 por un camino totalmente desconocido con nombres de calles que no entendía. Claro, todo en alemán con unos nombres más largos que un día sin pan.

Me equivoqué de calles, cogí otra salida del pueblo y aparecí donde Cristo perdió el gorro.

En 2010 no sé si existían los móviles modernos (al menos yo no tenía) y no pude compartir la ubicación de “hago chás y aparezco a tu lado”.

Nos llamamos varias veces y con mi inglés chapucero intenté describir el lugar en el que me encontraba.

Allí a oscuras, sola y sin saber dónde estaba ni si me encontrarían, pasé un miedo del Copón bendito.

Una hora después, medio llorosa, me encontraron en Sebastopol y partimos hacia la aventura.

Ese camino que perdí, por cosas del destino, lo hice después mil y una vez.

Hoy lo podría hacer con los ojos vendados, con 5 cervezas de medio litro en el cuerpo y bajo una tormenta de chuzos de punta. ¿Miedo? Ni me rozaría.

La primera vez en un camino puede que te sientas muerta de miedo como yo aquella noche.

La segunda vas aún con tensión.

La tercera mejor.

Y en algún momento, ese camino que te daba miedo o te ponía tensa, es tu camino.

Así funciona exactamente lo de descubrir tus habilidades y talentos.

Quizá (me lo invento) te encantaría hablar en público pero hacerlo la primera vez que tienes que hacerlo te cagas viva.

Pero a base de repetirlo, te vas sintiendo poco a poco más cómoda y llegado cierto punto lo haces sin pensar.

Yo no te puedo quitar el miedo que pasarás descubriendo tu camino.

Pero te lo puedo echar un cable para que sepas qué talentos puedes desarrollar aquí en este botón de abajo: